Miel pura, todo lo cura

La miel es un producto natural creado por las abejas que posee infinitas propiedades curativas. Para hacer un kilo de miel, una abeja recorre 40.000 Km.

El problema que nos estamos encontrando con este producto es que cada vez se producen más mieles de bajo coste, mieles autóctonas que son mezcladas con mieles provenientes de fuera de la Unión Europea, principalmente de China, donde el control sanitario es muy escaso para este producto.

Entre los años 2002 y 2004 se prohibió la miel procedente de China en los mercados europeos porque se analizaron algunas muestras y se encontraron restos de antibiótico cloranfenicol. Además, también aparecieron hongos de levadura muertos y otros restos.

Actualmente, podemos encontrar este tipo de miel en la mayoría de supermercados y más de la mitad contienen miel china, ya que los distribuidores no están obligados a especificar el origen de la miel, únicamente detallan que procede del exterior de la Unión Europea y que está mezclada con miel que sí es de la Unión Europea.

Existe un amplia variedad de mieles, la más cotizada en Marruecos, uno de los principales  países productores es la miel de tomillo, la que suele alcanzar el elevado precio de 30€ el kilo. Esta miel se ha llegado a llamar “néctar de los dioses” y sus consumidores aseguran que posee todo tipo de propiedades médicas. Es muy conocido el refrán: todo lo que pasa por el estómago de una abeja es medicinal. La miel de tomillo la suelen emplear para dolencias estomacales, irritaciones oculares, para quemaduras… y mezclada con otras plantas como la artemisa, el orégano y la lavanda, se utiliza para aliviar la tos y afecciones pulmonares.

En Francia se lleva utilizando la miel como cicatrizante de heridas quirúrgicas más de 25 años en el hospital de Limonges. La miel cura y cicatriza tres veces más rápido las heridas debido a su poder antibacteriano y su capacidad de proliferar células nuevas.

De las abejas también podemos obtener otros tres productos de un valor medicinal altísimo; la jalea real , el polen y el propóleo.

La jalea real es el alimento de la abeja reina, y ésta vive cuarenta veces más que las abejas obreras. Está compuesta principalmente de vitaminas y aminoácidos.

El polen de sauce es el más preciado debido a sus cualidades activas frente a la degeneración macular, debido a su alto contenido en carotenoides y proteínas.

El propóleo es una sustancia resinosa que emplean las abejas para envolver los cuerpos de los animales que mueren dentro de las colmenas, de esta forma evitan que se pudran y contaminen las colmenas. Los egipcios lo utilizaban para embalsamar los cuerpos. El propóleo posee propiedades contra los herpes, antivirales y para el tratamiento de infecciones. Actualmente, se están estudiando sus propiedades en cancerología y su uso en quimioterapia.

Para aprovecharnos de las propiedades curativas de la miel y sus derivados es muy importante reconocer su origen y cómo han sido manipulados.

Desde Vivelafruta aconsejamos el consumo de miel y derivados procedentes de apicultores reconocidos por la Unión Europea, especialmente los de nuestra tierra, pues España es un país que produce mieles de muy alta calidad.